ePrivacy and GPDR Cookie Consent by TermsFeed Generator Dolor cervical y dolor dorsal - Fisio Koshi | Fisioterapia | Terapias Manuales



Dolor cervical y dolor dorsal

TERAPIA MANUAL:
Técnica de Inhibición Suboccipital
El dolor cervical es la cuarta patología más incapacitante, afectando a casi una cuarta parte de la población mundial y provocando un impacto considerable en los pacientes y en su entorno. Es una patología con tendencia a la cronificación, que cursa con períodos de remisión y reaparición, lo que se traduce en un aumento de las visitas médicas, del gasto farmacéutico, del absentismo laboral y de la discapacidad.

Numerosos científicos han relacionado el dolor cervical crónico con disfunciones motoras, alteraciones de la columna vertebral, alteraciones de la función respiratoria y factores psicológicos. Sin embargo, habitualmente resulta imposible establecer una causa específica, por lo que resulta aún más importante realizar una evaluación global del paciente para determinar el origen real del problema y no limitarse a un tratamiento paliativo de los síntomas, que al final suele resultar ineficaz.

EJERCICIO TERAPÉUTICO: Ejercicio
de Control Motor Cervical
Así, el dolor cervical crónico se asocia a la existencia de otros factores, como la rectificación de la lordosis cervical, la posición de cabeza adelantada, las disfunciones de la articulación temporo-mandibular, la cifosis torácica, las alteraciones en la dinámica del hombro, las disfunciones respiratorias, las alteraciones del equilibrio, la existencia de malos hábitos posturales, la kinesiofobia, el catastrofismo… 

Asimismo, algunas patologías pueden estar asociadas al dolor cervical crónico, como las cefaleas cervicogénicas, los trastornos del sueño, la ansiedad, la sensación de discapacidad, las alteraciones del equilibrio, las sensaciones de hormigueo o pérdida de fuerza en brazos y manos…

El cuello es una estructura delicada sometida a un gran estrés y debe tratarse con moderación para evitar un repunte de los síntomas posterior a la sesión. Un buen trabajo previo en la zona dorsal asegura un mejor resultado del tratamiento del cuello, ya que una gran parte de la musculatura de la zona dorsal y de los hombros tiene inserciones cervicales.